Rafael Alberti
España, 1902 |
A PABLO ROJAS PAZ
(1º de octubre, 1956)
Para la Rubia y Enrique Pablo,
en el día de su mayor dolor.
Te nos vas, Pablo, con la primavera.
En España te vi como soldado
de la palabra, el pecho levantado
y el encendido corazón afuera.
Pocos te vieron como yo te viera.
¡Qué dolor verte ahora derribado!
Pero en el aire florará enterrado
tu corazón igual que una bandera.
Hoy por ti no me siento desterrado,
hoy que te vas en esta primavera,
puro y dulce en la luz, sin enemigo.
Pocos te vieron como yo te viera.
Si en España te vi como soldado,
allí estará tu corazón de amigo.
Tu corazón igual que una bandera.

La princesa de la noche de Miguel Oscar Menassa.
Óleo sobre lienzo de 100x81 cm.
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Galáctica, de Miguel Oscar Menassa.
Óleo sobre lienzo de 33x46 cm.
COPLAS DE JUAN PANADERO
POR LOS QUE MUEREN
DESTERRADOS
1
¡Muerte de los desterrados!
Hay noches que por la mar
van y no vuelven los barcos.
2
¡Qué pena en la lejanía!
Hay una alcoba sin nadie
con una cama vacía.
3
Y tal vez hay un huerto
un limonero caído,
junto a un rosal casi muerto.
4
Ya en las ansias de la muerte,
el desterrado ve un río
que arrastra, rota, una fuente.
5
Ve también una llanura
con un molino sin velas,
rota ya la arboladura.
6
Y ante una puerta cerrada,
ve mucha gente esperando...
Y luego... ya no ve nada. |